En la actualidad, si en un determinado momento del día
queremos conocer la hora exacta, lo tenemos muy fácil podemos consultar el
reloj de muñeca o el teléfono móvil, si se
diese la circunstancia que nos faltasen estos dos elementos también
podríamos consultarla en el ordenador o la televisión y si nos sucediese en la
calle en cualquier reloj urbano. Pero en los años de nuestro querido Tintin, no
lo tenían tan fácil, por eso existía y todavía
existe pero prácticamente es anecdótico un servicio telefónico al que se
llamaba y una grabación informaba de la hora.
Tintin hace uso de este sistema, en la estrella misteriosa,
cuando quiere saber la hora al recordar que el reloj que esta sobre la repisa
de la chimenea esta retrasado.
Este reloj telefónico se vio la luz en Paris en 1933, en el
observatorio de la ciudad del Louvre, para evitar que la línea telefónica fuse
ocupada por consultas horaria. Es un dispositivo que usa la técnica del cine
sonoro, consta de tres tiras, una para las horas y las otras dos para los
minutos y los segundos respectivamente, la voz grabada hera la de Marcel
Laporte, un locutor de radio.
Marcel
Laporte
En aquellos años la compañía que gestionaba las llamadas telefónicas
en Francia era Postet, télégraphes et téléphones “PTT” y
teniendo en cuenta que Francia y Bélgica siempre han estado muy relacionadas no
sería descabellado pensar que “PTT” también gestionase las llamadas de Bélgica.
Por lo que es muy posible que fuse la voz de Laporte quien informase de la hora
a Tintin. Y así sonaría la voz al otro lado del teléfono
